Lo extraño

. . .

Llegué a la conclusión de que cuando dije que no me importaba, me importaba más de lo que pensaba. Cuando me preguntaban que si aún sentía algo por esa persona, yo simplemente lo negaba & daba el asunto por terminado.

Y ahora me doy cuenta de la falta que me hace, de la necesidad que tengo por ver su sonrisa, mirar sus ojos impenetrables, sentir su aroma. 

Pero lo había olvidado, lenta & dolorosamente lo había echo, hasta que volvió tan sólo en un sueño. Ahí me besó de una forma inexplicable, y lo sentí tan real, que cuando desperté; quería volver a esa irrealidad.

Ahora sí que no me es extraño que lo extrañe tanto.